Propiedades:
El ajo es un potente antihelmíntico, estimulante, emenagogo, carminativo y antiespasmódico. Disminuye Pitta y Kapha, y es neutral a Vata, lo que lo convierte en un remedio versátil para equilibrar los doshas y mantener la salud digestiva y cardiovascular en armonía.

Acción Curativa y Usos:
El ajo es conocido por sus potentes propiedades curativas gracias a compuestos como la alicina, ajoeno y compuestos sulfurados. Actúa contra infecciones bacterianas, virales y fúngicas, lo que lo convierte en un excelente antimicrobiano natural. Es eficaz en el tratamiento de trastornos gástricos y biliares, estimulando la digestión, eliminando gases, y combatiendo la anorexia. Además, el ajo ayuda a reducir el colesterol y los triglicéridos, mejora la circulación sanguínea y previene enfermedades cardiovasculares al reducir la presión arterial.

El ajo también se utiliza para fortalecer el sistema inmunológico, combatir los resfriados y reducir la severidad de los síntomas gripales. Su capacidad para eliminar parásitos intestinales lo hace especialmente útil en el tratamiento de infecciones helmínticas.

Otros Beneficios:
El ajo tiene propiedades antioxidantes que ayudan a proteger las células del daño causado por los radicales libres, retrasando el envejecimiento celular. También puede ser utilizado como un expectorante natural, aliviando problemas respiratorios como la tos y la congestión.

Preparación:
Para preparar una infusión, tritura o pica un diente de ajo fresco y agrégalo a un litro de agua caliente. Dejar reposar durante 10-15 minutos antes de colar y consumir. También puedes añadir limón y miel para mejorar el sabor y potenciar sus efectos terapéuticos.

Dosis:
Beber una taza de la infusión tres veces al día, preferiblemente después de las comidas, para maximizar sus beneficios digestivos, antimicrobianos y cardiovasculares. Si se consume crudo, se recomienda un diente de ajo al día, picado o triturado, mezclado con miel o en ensaladas para potenciar su absorción.

Precauciones:
El ajo puede interactuar con algunos medicamentos anticoagulantes, por lo que se recomienda consultar con un profesional de la salud antes de su uso en dosis terapéuticas, especialmente si se están tomando medicamentos para la presión arterial o problemas de coagulación.